Desde entonces no tuvo otro quehacer que estarse leyendo aquella clase de libros donde él encontraba un relato parecido al de sus sueños. Se volvió muy flojo. Porque a todos los que les gusta leer mucho, de tanto estar sentados, les da flojera hacer cualquier otra cosa. Y tú sabes que el estarse sentado y quieto le llena a uno la cabeza de pensamientos. Y esos pensamientos viven y toman formas extrañas y se enredan de tal modo que, al cabo del tiempo, a la gente que eso le ocurre se vuelve loca.
Aquí tienes un ejemplo: yo.
estoy de acuerdo!
podría ser yo tambien.
1 comentario:
o tb yo. y me diecen que pienso demasiado.
pues no se.
digo yo que trabajo demasiado.
te parece q te visite la otra semana en wü?
podriamos pasar un dia de vacaciones. visitar algun museo, ir a la piscina, al cine, bailar, cocinar, hacer algo o nada, reir, hablar, llorar un ratito. te parece? que vas a hacer el fin de semana? yo a lo mejor ya el viernes o el sabado vuelvo a franconia...
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